miércoles, 11 de febrero de 2009

No me importa de adónde va el río


No me importa de adónde va el río
mientras yo fresca
y no me arrastre consigo.
No me importa de adónde se irá,
aunque trague agua de a veces,
aunque algún cangrejo
- entre los peces, en algún tanto –
brote en sal mi risa
entre sus pinzas.

No me importa si yo siento
limpia y suave;
si ligera me río y me salpico
de flores de libélulas de juncos;
si respiro cuando salgo más redonda
si no me arrastra al rápido
que araña.

No me importa si el agua tras mi cuerpo
se abandona, o
si tormenta, o si embalsa,
o se oscurece.
Yo entro y salgo. La ropa
seca, los ojos vivos:
no tengo miedo, no tengo miedo,
no es el mar, es el río.



Hoy os iba a hacer un relato de lo que llevo viviendo estas dos últimas semanas, pero un poco ordenado.

Por ejemplo, que las fotos que veis son de la Escuela Armando Parra Góngora que visité en Cuba, con dos profesoras de México que me llevaron con ellas como parte del Congreso Internacional Pedagogía, una maravilla a la que no asistí.. pero me colé en esa visita… pero no tengo el día..

Estoy de luna y alunada, estoy feliz y cansada, estoy un tanto enamorbada y no fui aún a Xochimilco. Estoy conjurándome a mi misma.

Ayer vi a mi prima Vanesa, un amor, bebimos sake, qué despropósito! y mañana a San Miguel de Allende, a visitar una Escuela de Parteras y Educación Sexual…

Me pasaría la mañana cantando… me voy a Coyoacán, a ver que me cuenta Frida!

No hay comentarios: